Te invitamos a experimentar la impresión tipográfica en uno de los primeros talleres de rescate de la técnica en Uruguay y la región.
El programa esta pensado para estudiantes o recién graduados de las áreas de Diseño gráfico, Comunicación visual y Bellas artes, ofreciendo la oportunidad de conocer y experimentar de primera mano en el área de impresión tipográfica y producción gráfica en general.
La experiencia tiene una duración de 6 a 12 meses lo que nos permite generar una mayor rotación dando la posibilidad a más estudiantes de participar en el programa.
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La relación del estudiante con el taller será de aprendiz, colaborando gradualmente en diferentes tareas y proyectos del taller a medida que adquiere las habilidades necesarias para poder realizar proyectos propios.
Con el tiempo irá adquiriendo de primera mano los secretos de la técnica y el oficio participando en proyectos artísticos y comerciales del taller.
Tendrá una participación activa colaborando como ayudante en talleres de formación, proyectos de producción gráfica, catalogación de tipografía, proyectos de rescate de patrimonio gráfico en antiguas imprentas, así como en las tareas básicas de mantenimiento del taller.
Con este programa se busca rescatar los valores del aprendizaje artesano, donde la disposición del estudiante frente al acto de aprender debe ser de humildad y solidaria con sus iguales, fomentando el trabajo colectivo. Además requiere un compromiso de participación de un mínimo de 3 horas semanales mientras dure la experiencia.
Es importante aclarar que la participación en el programa no genera ningún vínculo laboral en el taller, teniendo los estudiantes la posibilidad (bajo supervisión) de realizar actividades de investigación académica y producción de proyectos propios.
POR QUÉ DIABLXS DE LA IMPRENTA?
El nombre del programa surgió de rescatar la historia de Titivillus, una figura demoníaca creada por los monjes durante la Edad Media al que se le atribuía ser el responsable de los errores cometidos por los escribas en la confección de los códices y manuscritos.
La función de esta creación era lograr que los escribas creyeran que perder la concentración en su tarea y cometer errores era un pecado.
La primera cita a Titivillus se encuentra en el año 1285 en el Tractatus de Penitentia, de John of Wales.
Titivillus estaba obligado a encontrar diariamente suficientes errores para llenar mil veces su bolsa, con los cuales el Diablo bajaba al infierno y donde cada pecado era debidamente registrado en un libro con el nombre del monje que lo había cometido, para ser leído el Día del Juicio Final.
Con la invención de la imprenta en 1440 la figura de Titivillus fue adoptada por los primeros impresores manteniendo a este demonio como responsable de los errores que se producían al momento de imprimir.
Es así que durante muchos años luego de la invención de la imprenta los errores ocasionados por los tipográfos a la hora de componer los textos y otros tipos de errores relacionados al proceso de impresión o encuadernación siguieron atribuyéndose a esta figura demoníaca.
El caso de la Biblia Maldita
En 1631 los impresores reales de Carlos I de Inglaterra, Robert Barker y Martin Lucas, recibieron el encargo de editar 1.000 Biblias, las cuales no se sabe si por error o por sabojate les faltaban dos letras en el sexto mandamiento, esas dos letras formaban la palabra «no». Por lo que el texto se leía: «Cometerás actos impuros» en lugar de «No cometerás actos impuros».
Carlos I ordenó quemar en la hoguera todas las copias del libro e impuso a los impresores una multa de 300 libras además de quitarles la licencia para editar más libros.
Al pasar los años y con la expansión de la imprenta por Europa y el mundo, se realizaron diferentes interpretaciones de este demonio, asignándole diferentes nombres o significados.
En Uruguay y la región, es común aún escuchar como los impresores con más años en el oficio se refieren al «duende de la imprenta» cuando aparece algún error en un impreso.
Es así que en la historia gráfica a aquellos aprendices que mezclaron tinta, distribuyeron tipos móviles, realizaron trabajos tediosos en la imprenta a cambio de aprender haciendo y cometiendo errores, se los llamaba «diablos o duendes de la imprenta».
Existen varias teorías del origen de este nombre, una de ellas lo atribuía a la tarea que realizaban los aprendices al trabajar con la «caja del infierno» . Esta caja era el lugar, donde las imprentas desechaban los tipos móviles desgastados o rotos para luego ser derretidos y refundidos en nuevas letras y que los aprendices tenían que encargarse de ordenar y separar los diferentes elementos antes de mandar a fundición.
Otras historias que vinculan a la imprenta con el Diablo y el Infierno hacen referencia a Johann Fust socio comercial de Johann Gutenberg quien intento vender varias Biblias de las impresas por Gutenberg al rey de Francia Luix XI haciéndolas pasar por Biblias copiadas a mano quien fue descubierto, encarcelado y acusado de brujería.
Hasta el propio Aldus Manutius, el gran impresor veneciano tiene un capítulo en el orígen de la frase «Diablos de la imprenta». Debido a trabajar con un aprendiz de origen africano fue acusado de practicar las artes negras y a su aprendiz se lo presento como la encarnación de Satanás y se lo apodo el Diablo de la imprenta.
Hell-box, Peter Tylor
Soy el comienzo del lenguaje.
El tipo desgastado amontonado en mis tripas
con tinta, grasa, pedazos de papel
en el que he escrito la palabra
ocurrencia
como la biografía del mundo.
Mis entrañas formadas
el invencible romano
de un caldero de impurezas:
cara angulosa, barba recortada, columna vertebral
como una baqueta del hombro al pie.
Cuerpos de todo tipo
surgir
de mi fuego.
mis legiones
marchar a través de la página
al lenguaje,
el pensamiento hace clic en su lugar,
hora
se endurece en el ser.
(*) Frank Granger (1997). El diablo de la imprenta
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Si te interesa realizar esta experiencia formativa te invitamos a completar el siguiente formulario.
Una vez culminado el plazo de postulación se les contactará por mail para coordinar una entrevista personal como parte del proceso de selección.
El plazo de la postulación para el primer semestre culmina el 31/01/2024.
COMIENZO MARZO 2024
«… En los libros presento una porción de la mente eterna apresada en su progreso por el mundo, grabada en un instante y conservada para toda la eternidad. Por medio de mí, Sócrates y Platón, Chaucer y los bardos se convierten para ustedes en amigos leales que siempre los rodean y los auxilian. Yo soy el ejercito plomizo que conquista el mundo: ¡YO SOY EL TIPO!
Frederic G. Goudy
Publicado originalmente por la Village Press, 1931. Reproducido en A Bibliography of the Village Press por Melbert B. Cary Jr (Nueva York: The Press of the Woolly Whale, 1938).